La vida de Ivanka Larsson cambia radicalmente cuando conoce a Theodore Terrier, su vecino. Se sorprende porque jamás le ha visto. Theo resultó ser una distracción en ese momento, y ese golpe resulta ser lo que enlaza sus vidas, para jamás separarse. La curiosidad de Ivanka acerca de la extraña personalidad inocente de Theo, le obliga a permanecer junto a él; y sin quererlo, se enamora perdidamente. Esta historia, cuya trama es narrada bajo los ojos de Ivanka, cuenta a través de experiencias, nuevos pensamientos, muchos cambios, y una que otra sorpresa, una historia encantadora, romántica, un poco angustiante y con mucho humor, las vivencias que tuvo ella misma y Theodore Larsson, el chico de las flores.