Azrael, el arcángel de la muerte, a pesar de su tétrico nombre, su misión consiste en rescatar del infierno aquellas almas que fueron injustamente condenadas. Dicen que él es uno de los encargados de la protección del último círculo del infierno, impidiendo la salida de los demonios y custodiando la puerta para que no puedan salir. Pero hay almas que ni siquiera el puede salvar y demonios que nadie puede detener.