Máscara de dos almas rotas

Dylan, manejado por su conciencia se ve obligado a proteger a todo su equipo de un grupo de delincuentes mucho peor que el propio, pidiéndole a Rob Jacobs, uno de los asesinos más peligrosos del país que lo ayude. Este al quedarse sin opciones acepta hacerle un favor a cambio a Rob, encargándose así de mantener a su sobrina, Summer Jacobs, fuera de todo asunto que pudiese ser bochornoso, lo que este no sabe es que a pesar de ser un dolor de cabeza, está a punto de enfrentarse a otro ser humano peor pero en versión femenina.

La palabra venganza tiene cara de perra, y esa es Summer Jacobs.

¿A quien no le gusta ver al diablo enfrentándose con su propio reflejo?