Estar concentrados en nuestros mundos es bastante común, lo hacemos tanto que no siquiera nos damos cuenta de nuestro alrededor. Conocer gente nueva siempre es bueno...o eso creía, pero al conocerle todo cambio, su arrogancia me hacía enfadar, su estúpida perfección me irritaba, todo él me hacía odiarlo hasta que pasó lo inesperado, ahora estoy encadenada y no me puedo librar de estas cadenas.All Rights Reserved