
No era él, lo sabía, la imagen que le devolvía el espejo no era la suya, había algo dentro de él, alguien. O quizás era él el que estaba dentro de otra persona, ¿cómo saberlo? ¡cómo! Se le carcomía el alma solo de pensar en él de tiempos lejanos, la vida es un tictac que el alma ignora, ahora ni su nombre puede recordar.All Rights Reserved