Cuando Annabeth se vio impulsada en permanecer Junto a su hermano, superando tres difíciles pruebas que pondrían en riesgo su humanidad, con la única intención de formar parte de una organización mafiosa, nunca esperó enamorarse de su insensible Líder.
Esta de más decir que Luciano no es un caballero, que no siente respeto hacia las mujeres, ni hacia ninguna persona en específico. Él simplemente cree en luchar por los logros que se desean alcanzar, sin importar cuanta sangre deba derramarse. Y por supuesto, para él toda falla debe ser castigada.
En sus planes nunca estuvo despertar sentimientos hacia una ingenua primeriza, pues Luciano es una bestia. Y una bestia no siente, no cree en nada, y mucho menos se enamora.