Regla 1: No pasar por frente al espejo en la noche. Regla 2: No dejar puertas abiertas cuando vayas a dormir Regla 3 y última: Una vez que sepas las reglas, ya eres un jugador. Reímos, al leer las reglas de un viejo libro en el fondo de la biblioteca, sin saber en que infierno nos habíamos condenado.