Ella tenia un montón de problemas encima, más en los que ella misma se había metido. Todo se le había ido de las manos, su vida ya no era normal. Tenía que recuperar su vida de nuevo de alguna forma, pero ella sola no podía. Aunque no quería admitir que necesitaba ayuda. Su vida era normal, como cualquier chica de veintitrés años que está apunto de terminar la universidad. Él había pasado por aquí lo mismo y podía ayudarla, pero ella no se dejaba. Hasta que no se abriese a contar sus problemas nadie podría ayudarle. ¿Podría Sophia confiar en alguien para finalmente dejarse ayudar?All Rights Reserved