Fubuki había tenido que abandonar el equipo tras la lesión sufrida en uno de los partidos pero, no sólo había dejado atrás a su equipo sino que también a Goenji. Después de algunas semanas ya estaba listo para volver. Podría volver a jugar al lado de todos y retomar su amor con Goenji. Pero la sorpresa llega cuando se entera de qur Goenji tiene algo con Toramaru y aún así lo sigue buscando a él. Hiroto, su compañero de habitación, trata de animarlo y consolarlo cada vez que Goenji lo destroza. Finalmente, Fubuki decide que lo mejor sería irse del equipo pero Hiroto no puede dejar que haga eso. No sólo por el bien del equipo sino porque él mismo ama a aquel peliplateado.