Después de enviar solicitudes a todos los hospitales de Londres, el día de su graduación, Isabella recibe una carta de aceptación para hacer una residencia en el Hospital Saint Thomas, el mejor de Londres. Ella esta feliz por la oportunidad, lo que no se imagina es que aparte de tener la mejor preparación como médico, también encontrará lo dulce y lo agrio del amor, en su médico en jefe, el Dr. Evans. Lo malo de esta historia, es que hay una regla importantísima en los hospitales: -No está permitido ningún tipo de relación amorosa entre médicos de cualquier rango, que laboren en el hospital. Han escuchado esa frase que dice: El amor todo lo puede. Pues veamos hasta donde se puede.