1 Parte Continúa Harry, un vampiro mágico, que cada noche, un rostro desconocido se colaba en sus sueños: un chico de brillantes ojos aguamarina y sonrisa radiante. La imagen persistente lo atormentaba, despertando un deseo que no podía explicar.
Mientras tanto, Percy, un semidios valiente y leal, recibió una misión divina: proteger al vampiro de unas amenazas desconocidas. A regañadientes, aceptó la tarea, sin saber que su destino estaba entrelazado con el de Harry.
Cuando sus caminos se cruzaron, una chispa de reconocimiento surgió entre ellos. Los sueños de Harry se habían vuelto realidad. Juntos, debían enfrentar las fuerzas que buscaban destruirlos.
En la batalla contra aquellos enemigos, Harry y Percy descubrieron que su conexión era más que casualidad. Era un lazo eterno, forjado en el corazón de ambos. Y en ese beso de consuelo, encontraron la luz que los animó a seguir.