Santiago creció sin conocer a su papá. Y cuando preguntó por él, le contaron que se había ido cuando supo que su mamá estaba embarazada. Quería ser libre,había dicho. Su madre lo crió sola hasta que conoció a Martín, con quien se casó y tuvo a Candela. Entre los cuatro armaron una familia tan feliz como cualquier otra. Hasta que, un día, la llegada de una visita inesperada sacudió la realidad de Santiago, cambiando para siempre sus ideas sobre la libertad. Con un lenguaje claro y potente, Margarita Mainé nos presenta esta hermosa historia de amor filial e identidad.