Aline Klein tiene diecisiete años, un cupo asegurado en la universidad, un buen grupo de amigas, un novio perfecto, y un secreto desgarrador. Aline mató a alguien. Está bien; nadie lo sabe. Nadie más estuvo allí. Nadie podría enterarse nunca. El cuerpo está muy bien enterrado. Muy bien escondido. Hasta que Aline recibe un extraño mensaje del difunto; lo que es imposible, porque está muerto. Ella misma lo mató. Pero ahora tendrá que pagar por lo que hizo. Lo siento, Aline. Debiste haberlo pensado mejor antes de matar a tu mejor amigo.