Tenia miedo, siempre tengo miedo a abrir este huecudo órgano inútil y que lo lastimen como siempre, duele verlo caminar y que muchas le llamen la atención menos yo, duele oírlo hablar sobre tantas cosas bonitas y tantas historias de su pasado en el que la de mi nombre, solo exista en mi cabeza, en esta imaginación totalmente paranoica porque veo cosas donde no las hay, siempre tengo esperanzas en las cosas más pérdidas, siempre sonrió cuando debería llorar, amo cuando debería querer, siempre estoy a un paso de la realidad explorando el dolor más a fondo, llenando mi corazón de experiencias dolorosas, apuñalando mi autoestima ¿por que? Porque siempre saco la conclusión que la del error soy yo, que todo está mal en mi y la verdad es que (Yo no tengo la culpa, no soy el tipo de mujer con la que sueñas) no soy la rompe corazones, no soy qué la se viste como puta, soy solamente yo y como me quieras decir. En fin siempre duele todo por las insignificante qué sea, una cosa te lleva a la otra y así sucesivamente arrastrando recuerdos verdaderamente horrorosos o quizá felices qué destruirán aun más tu vida o le aliviaran el dolor por un segundo. No se que escribo, si palabras de mi historias o señales de sufrimiento, de todos modos las dos dan el mismo significado, entonces de todo esto se puedo concluir que mi vida esta amarrada a el.