La mano de Dios

Nadie sabe que sucedió.
Solo pasó.
Un día los demonios salieron del lugar inmundo en el que se suponía tenían que estar e hicieron fiesta con nuestras debilidades. Un día solo irrumpieron y tiñeron el mundo de más sangre y más crueldad de la que podíamos imaginar aún con nuestras destructivas mentes.
No es el apocalipsis, eso hubiese sido mejor, porque esto...
Esto no parece tener fin.
Esta es la guerra. No entre el cielo y la tierra, sino entre ellos y nosotros.
Y nosotros, la "Mano de Dios", nos llevaremos a cuantos podamos por delante.
¿Por qué? porque nadie va a venir a salvarnos.
¿El cielo? puede consumirse y descender al infierno.
Estamos solos. Y eso, por mí está bien.
Sin embargo, esta no es solo una historia de demonios.
También es una historia de amor en tiempos de exorcismos.