cambia formas: Eclipse lunar

Tal vez sea por la complejidad de su mundo o por la organización de sus mentes, pero jamás querría ser un humano normal y corriente, de a pie como ellos dicen.

Caminan preocupados por un futuro mejor, el cual no disfrutaran porque, al igual que en el presente, estarán demasiado ocupados intentando arreglar problemas que se encuentran fuera de su alcance de comprensión y razonamiento. Por eso me alegré mucho cunado fui a Wolford, podía dejar de aparentar ser una de ellos, una mente que solo se preocupaba de lo conocido y quería ignorar todo aquello todavía desconocía y era incapaz de entender.

Wolford era nuestro escondite, una pequeña fortaleza de piedra en la que los cambia-formas podíamos relajarnos a disfrutar de gente, que como yo, podía cambiar su forma a la de un animal, concretamente el lobo.

Vivimos ocultos en un parque nacional esperando a que esas mentes que no querían conocernos lo hicieran pues aunque ya hubo muchos de los nuestro que dejaron ver sus habilidades, fueron perseguidos y aniquilados por ser diferentes a lo que ellos denominan corriente. Porque aunque nos esforcemos en ocultarlo, lo desconocido nos da miedo.

Me llamo Darina, soy una cambia-formas harta de la sociedad que todos admiran. Incluso ahora, en mi cuarto, mirando por la ventana me doy cuenta de todo el daño que podemos hacer a cualquier ser, ya seamos cambia-formas o estáticos (como nosotros nos referíamos a los que no podían transformarse y su apariencia será la misma para siempre). Muchos de vosotros ni siquiera nos conozcáis, a decir verdad, la mayoría creeréis que estos párrafos salieron de la mente de una persona con mucha imaginación pero si leéis atentamente quizás cambiéis de parecer