Pasean por las calles de Moscú, indistinguibles del resto de la población, y se llaman a sí mismos los Otros. Son criaturas con poderes excepcionales que han perdido su humanidad y pueden internarse en el Crepúsculo, un mundo de sombras paralelo al nuestro. Cada Otro ha tenido que jurar lealtad o bien a la Luz o bien a las Tinieblas. Ambos bandos conviven en una difícil tregua desde que, tiempo atrás, para impedir el caos y la aniquilación, firmaron un pacto y crearon dos patrullas -la Guardia Nocturna y la Guardia Diurna- para vigilarse de cerca. Su objetivo no es destruirse, sino mantener el precario equilibrio entre el bien y el mal. Sin embargo, una antigua profecía dice que un día aparecerá un poderoso Otro que será tentado por uno de los bandos e inclinará la balanza. Ese día ha llegado...