A veces, cuando miramos al pasado nos damos cuenta que hemos cambiado de una manera impresionante, así lo sienten algunos, aunque todos los días se vean iguales, hay algo que nos hace ver el mundo de otra forma.
Estos últimos días he estado contemplando mi pasado, pensando en lo que sucedería si hubiera tomado distintas decisiones. Sólo estoy perdiendo el tiempo, no puedo cambiar mi pasado, ni mi actual presente porque estoy tan sorprendida que estoy petrificada, no puedo creer lo que está pasando; lo único que sé, es que, de ahora en adelante, mi futuro no será como lo tenía planeado. Después de todo, estoy viviendo un minuto a la vez.
Todos mis sueños de adolescentes, todas las expectativas, todos los planes... En fin, todo arruinado. Todo arruinado por no decir la verdad.
Tal vez mi historia sea la típica historia de una chica que pierde al amor de su vida, que tiene una familia jodida, que todo iba perfecto hasta que "el chico perfecto" llega y toda esa mierda, la diferencia es que no soy tan normal "única y especial" diría la sociedad, la verdad, es que ninguno de nosotros es "normal" todos tenemos fallas que nos joden y nos distinguen; pero yo, yo soy jodidamente distinguible sobre los demás.
Escucho pasos detrás de mí y corro como nunca.
-¡Déjenme! -les grito desesperada mientras me siguen.
-Tienes que quedarte aquí, Iris. ¡Perteneces a este lugar! ¡Tú no eres una humana normal! -grita un guardia sin dejar de perseguirme...
-¡No! Yo pertenezco a mi ciudad, con mis padres... -cuando estoy por llegar a la salida veo a dos chicos.
Practicando con espadas...
-¡Sky! ¡Atrápala! -grita Rick...
Uno de los chicos desvía su mirada y nuestros ojos se conectan
Sus ojos dorados me miran fijamente...
Revolotea despreocupado su cabello rubio, pero luego...
Se da cuenta de lo que sucede y me apunta con su espada
Yo me detengo inmediatamente...