La profesora de música estaba ausente ¿por qué? Pues se le había enfermado el marido y al parecer era bastante grave, cáncer de hígado, según decía la gente. ¿Esto es algo malo? Bastante, pero lo peor no es que el marido de Pamela estuviera a punto de morir, sino que la escuela había mandado a un sustituto. ¿Y qué hay peor que un sustituto? Nada. Porque si los profesores ya son unos desgraciados, los sustitutos, lo son al cuadrado.
Negué con la cabeza. Sentada en el pupitre, como todos mis compañeros del curso "4B", esperando la llegada de ese profesor. Quizás sea bajito, arrogante, gordo, torpe y muy anciano.
O quizás no fuera tan malo, hasta podía ser simpático ... Bah, ni que soñara.
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¡Nueva novela!
Adaptada, cambié un poco la narración y algunos nombres, pero la idea principal es la misma :D
LAS AMO♥️
MUCHAS GRACIAS POR LEERME.
La angustia en la que vive Mariana sus noches por la culpa al traicionar a su esposo, -queriendo en un caso y obligada en otros- es la razón de un viaje a una isla en las Antillas para buscar el perdón, después de seis meses de separación, contándole a su esposo toda la verdad y aclarando que a pesar de todo lo vivido, ella no ha dejado de amarlo e insiste en conseguir con su honestidad, regresar con él a su casa, para que Camilo viva feliz al lado de su pequeño hijo, que lo extraña.
Un viaje de un día, a la sombra de las palmeras bajo el calor abrazador del sol o en la noche ante las luces de colores y escenarios coloniales, decir la verdad aunque le duela al traicionado y sufra al relatar sus aventuras, la mujer que traicionó. ¿Perdón y olvido? ¿Qué haría usted en su posición?