Nacer con alas es algo que solo ocurría en un parto de uno en un millón. Sherlock jamás había reparado en esos seres antes, sabía de su existencia y lo sumamente raros que eran. Más a su parecer no eran algo en lo que debiera prestar atención, a menos que fuera por un caso. O eso pensaba antes de conocer a John Watson.All Rights Reserved