«Ahora miro hacia atrás y no la reconozco. Continúa siendo ella; son sus mismos labios, su mismo cabello, el mismo simpático agujero en su mentón, su misma delgada nariz. Sin embargo al mismo tiempo no lo es; el temor en su mirada y el temblor en sus manos al presionar aquel amuleto contra su pecho han desaparecido. Es ella, pero al mismo tiempo no lo es, porque aunque intente mirarla de una manera distinta; aunque intente ver en lo que se ha convertido, solo soy capaz de verla echa una bolita mientras apretuja a su hermana contra su cuerpo y repite que todo estará bien. Es como si fuera un fantasma para mí; un fantasma del ayer» Historia publicada; 05/11/2016 Historia acabada; 30/03/2017