Julieta Beckham sabía que las cosas no iban a ir bien desde el momento en que su novio la engañó con su mejor amiga a los quince. Luego de eso, todo se vino abajo lentamente. Al año siguiente su padre se metió con personas con las que no debió meterse, porque no había dinero suficiente. Su abuelo tuvo un infarto y fue internado en el hospital, porque seguía sin haber dinero suficiente. Y su madre comenzó a tomar, de a pocos, pero lo estaba haciendo de nuevo. Y luego, finalmente todo se vino abajo, su padre fue asesinado por toda esa gente corrupta. Y a los días, falleció su abuelo, luego de tres años de lucha. Y su madre perdió completamente el juicio, regresando a su alcoholismo de nuevo.
Y ella finalmente se permitió a si misma caer. Luego de años de guardarse sus sentimientos hacia sí misma, se permitió a si misma llorar en las escaleras de emergencia de su edificio. Y ahí lo conoció a él.
Adam Black. El chico no tan chico, pues era un tanto mayor que ella. Y era inexplicable todo lo que la hacía sentir, desde el momento en que se sentó a su lado en las escaleras y la reconfortó, hasta el momento en que decidió que quería besarla. Y lo hizo. Y ella lo dejó.
Y es que, todo se sentía extrañamente natural con él.