Sé que hay alguien, alguien que encaja a la perfección conmigo. Sé que una parte de mi corazón pertenece a una persona especial. No sé quién es, ni si lo conoceré, pero solo sé que todos hemos nacido teniendo a nuestra media naranja. Algunos tienen la suerte de conocerse, otros simplemente sueñan. A veces soy esa clase de chica, con la duda de cómo será su destino.
Mi nombre es Hera. Soy de esas que le gustaba pasar desapercibida. Vivía con miedo a equivocarme, miedo a callar, miedo a confiar, miedo a sus opiniones ... hasta que lo encontré.
Iba al instituto, aquél era mi último año. Podía decidir cómo recordarlo. Como siempre lo había hecho o arriesgándome. Esa idea no me entusiasmaba mucho, en cambio a ellas si. Mis amigas eran muy distintas a mí, a pesar de ello no podría imaginar mi vida sin alguna de ellas. Solían hacerme reír, hacían que intentara, me ayudaban a levantarme. Ellas no me esperaban en la meta sino que corrían conmigo. A mi en cambio me gustaba la soledad, aunque tenerlas a mi lado era una gran suerte.
Mi instituto era privado, llevábamos uniforme, y yo era la típica niña buena. No creí que pudiese cambiar pero desde aquél momento, mi sueño se hizo realidad.
Becky tiene 23 años y una hija de 4 años que fue diagnosticada con leucemia, para salvar la vida de su hija ella decide vender su cuerpo en un club nocturno, lugar donde conocerá a freen, una empresaria que luego de tener una discusión con su esposa decide ir al club para calmar su deseo.
Historia original
Freen es un personaje intersexual