Una ciudad, un mismo instituto, amores prohibidos, drogas y adolescentes incomprendidos. No es fácil tener 17 años. Y ser esa amiga gorda, que te gusten las píldoras, enamorarte de tu mejor amigo, ser gay o que todo este dispuesto a hacerte la vida imposible. Un mundo, una historia, cada adolescente. Definitivamente no es fácil ser uno de ellos.