Era momento de aceptar... Pero la duda me invadió, yo estaba enamorada, aunque sabia bien que esto para él solo era un trato, sabia que solo aceptaba por conveniencia... Ella estaba por dar el si. Dirigí mi vista hacia ella por un instante, y en su mirada vi duda... El miedo me invadió, la amaba y no quería perderle. Ambos vivían con sus sentimientos guardados en si, vivían con la duda de saberse correspondidos, ninguno era capaz de hablar, se guardaban lo que sentían el uno por el otro... Enfrentar sus sentimientos les costaba más de lo que creían, pues no querían volver a sufrir.