Jonas Binder, el presidente de la corte acaba de condenar a muerte a Adam Yamamoto el líder Yakuza más importante de Nueva York, un gran golpe para el crimen organizado de la ciudad. Meses después comienza a recibir amenazas de parte de la familia y socios de Yamamoto, por lo que decide que cada miembro de su familia tenga un guardaespaldas; en especial, su nieto. Nathan Binder es un joven mimado y egoísta y carente del sentido de la hempatía, odia a sus padres -o eso pretende-, tanto como ellos a él, pero siempre obedece a lo que su abuelo ordena, pero esta vez no, no está dispuesto a tener a alguien siguiéndolo las veinticuatro horas del día por lo que hará, hasta lo imposible por deshacerse del dichoso guardaespaldas.