Los presidiarios del cielo

Víctor es un hombre condenado que lleva un enorme peso tras sus espaldas y mucho tiempo libre para sentarse, relajarse -aunque sin hacerlo de veras- y solo dedicarse a sí mismo para no hacer otra cosa que no sea pensar y reflexionar. La soledad puede ser una bendición y una maldición al mismo tiempo; él no tiene duda alguna acerca de ello.

Durante una buena noche, tiene una gran revelación que no es capaz de comprender del todo, razón por la cual se abre a sí mismo y comienza a rememorar gran parte de su historia de vida y de los hechos y circunstancias que, a sus más de cuarenta primaveras, lo han llevado hasta el sitio donde se encuentra.

A través de un viaje por sus recuerdos, de manera introspectiva, nos ofrecerá varios de los más grandes momentos que lo han marcado de por vida: la chica de la que se enamoró en su adolescencia, un antiguo revolver colt que podría cambiarlo todo y el milagro, a su peculiar manera, claro está.

Otra cosa en la que no puede dejar de pensar es en la bonita Carolina, dama que teme jamás volver a ver.