La vida me enseño que no hay que pararse cada vez que te den un portazo en la cara. Que aunque haya cosas difíciles, son las que mas valen la pena. Me enseño a seguir adelante y a aprender de cada uno de los errores cometidos, no solo míos, de los demás también. Me enseñó que hay que esforzarse mucho para ser alguien en la vida, que hay que estudiar para tener un buen futuro, que no puedo depender de los demás y que se pasa en un abrir y cerrar de ojos, así que hay que aprovechar cada minuto que tenemos.