Todo el mundo tiene ese momento. El momento en el que algo dentro de nosotros se acciona y dejamos de ser quienes éramos instantes antes. No es solamente dejar de ser como uno era, es dejar de ver el mundo como tal lo veía. Y es exactamente eso lo que provoca dicho cambio. El mundo. Estoy convencida de que todos sufrimos esta transformación, ya sea en un momento u otro de nuestras vidas; sacando a nuestros propios cuerpos y mentes del control de nuestro conjunto, tardando meses en volver a ser capaces de sentirnos como un solo elemento y no como diferentes partes de un puzzle que no encaja. Supongo que lo que provoca el cambio de cada persona es diferente dependiendo de los demonios con los que duerma cada una. Aunque, a decir verdad, no me extrañaría que todos éstos fueran provocados por ella. Y es que, meses después de creer que vuelvo a tener el más absoluto control sobre mi misma, sigo dándome cuenta de que pierdo partes todos los días por ella.All Rights Reserved
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