El tiempo es una palabra efímera, que jamas hemos podido aprovechar al máximo, generalmente las personas esperan mucho para poder decir lo que sienten, pero a veces es demasiado tarde. Nos pasamos la vida buscando una "media naranja" como algunos la llaman, perdiéndonos en cada cuerpo y en cada alma, sin embargo nadie logra llenarnos por completo. Por ratos son migajas de un amor residual, y otros solo dan la mitad de lo que deberían. Y nos conformamos con tan poco, que nos aferramos hasta el punto de no querer soltar, solo podemos dejar ir cuando ya hemos perdido nuestra esencia. -Eres aquel que puede construirme y romperme al mismo tiempo, tengo que dejarte ir... Y con el alma hecha pedazos, soltó su fotografía y se fue.