"Bueno, Gina, verás, cuando tú no estás, en esta casa pasan muchas cosas" dije a aquella chica que era mi novia y que estaba tan enamorada de mí. "Harry, ¿me estás engañando?" preguntó ella con una voz temblorosa, y aquellos ojos marrones e inocentes nublados. "Yo creo que es peor que eso" me armé de valor, y se lo dije, dije aquellas palabras que supe que tanto le dolerían. Se lo confesé.