JongDae solía pensar, cuando él era más joven y el mar más claro, que no podía existir nada bueno en la oscuridad. Eso es lo que le habían enseñado durante toda su vida y nunca se había atrevido a refutar al respecto. Él era luz, y su lugar como tal eran las aguas poco profundas, los arrecifes de coral y las corrientes cálidas. Las cosas tenían su lugar justo dentro de lo que conocía y jamás había piezas sueltas. Así fue hasta que conoció a MinSeok y su mundo entero cambio.All Rights Reserved
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