Con una ceguera que me envuelve
con una bala ciega que no se devuelve
bonito revólver negro con una bala de oro
dedo sudoroso e indeciso. Silencio sin decoro.
Revólver negro, alumno de vida, profesor de muerte
bala de oro, rápida, ciega y sorda
dedo sudoroso, indeciso, como mi suerte
Revólver negro, loco, que no se endereza
dedo indeciso, una sola bala, una sola vida
una bala de oro, responsable de mi poca destreza
Mesa vacía, limpia. Whisky a mi izquierda
mi dedo y el gatillo se acarician, bonita escena
pierdo la fuerza; la recupero. El teléfono suena
¿ Debería contestar? Voy a contestar. No, a la mierda
Mi mente inquieta, mi mano se paraliza
pienso en mi felicidad, en tu cara enrojecida
pienso en mi tristeza, nadie la ve, no hay salida
que estupidez: las lágrimas besan mi sonrisa
Maldita vida, yo no existo solo soy un muñeco
bonito revólver negro, a ti me dirijo
cañón en la sien, dedo fuerte, brazo fijo
dedo y gatillo se acarician de nuevo, sonido seco
¿Estoy vivo? Si... que continúe el juego.