No me gusta fardar, pero soy la persona más feliz del mundo, que no tiene nada que ver con que no conozca los días de manta, helado y lupa buscando hombro libre de llantos. La clave es pensar que la vida es un baile, da igual si le pisas los zapatos a alguien o si el ritmo de la música cambia bruscamente y tu no te encuentras. Solamente bailala como si no hubiera mañana, porque ciertamente , y por muy duro que suene, nunca sabremos si lo hay.All Rights Reserved