¡No soy tu sirvienta!... ¿O sí?

Isabell Winter y su mejor amiga Samantha Hewcupp entran por azares del destino al hotel más lujoso del país, el Hotel Golden Flower. Ellas aprovechando la ocasión, deciden hacer una "broma": Intentar entrar en la habitación más lujosa del hotel. Ellas sin poder creerlo logran entrar, pero cuando todo parece el paraíso una familia bastante "peculiar" entra a la habitación. Lo único que se les ocurre decir para no ir a la cárcel es que ellas son sus Sirvientas Personales, ¿qué podría salir mal?