La más pequeña de las mellizas. De dulces y delicados cabellos rojizos ondulados. Un ojo gris como la niebla y el otro azul como el mar. Estaba tan herida, tan perdida, que jamás podría unir todas sus piezas. ¿Por qué? Si sólo tenía diez años, una niña como ella debía disfrutar su tierna infancia. Pero ella no podía, por Octavia. Era indefensa ante su melliza y no le gustaría cambiarlo. #12 Libro de la saga Lazos Enfermizos.