Esta no es una historia cualquiera. No veréis princesas con finales felices, pues los hemos intercambiado por aquellos finales que te remueven las entrañas, te arañan el alma y te golpean en la cara.
Todos creemos que merecemos tener un final feliz pero la vida nos demuestra lo contrario
Todo mal comienzo, tiene un fin pésimo
Y esto fue lo que sucedió.....