El decifrar a una persona es un desafío, una lucha contra la mente de la otra persona, cada quien puede actuar de una manera pero pensar de otra muy diferentes, las convicciones, preferencias, gustos, todo lo que abarca y tenga que ver con la persona que escojamos para descifrar es un misterio, lo más gartificante es poder sobrepasar esas barreras de indiferencia camufladas con buena actitud, o arrogancia, depende de la persona y depende de quién seas tú.