En la presente entrega Sergio, a quien conocimos en Bástian, siempre seremos amigos, describe con evidente desenfado sus traviesas aventuras las cuales nos remiten al tipo que, desvergonzadamente, va disfrutando de su atolondrada existencia:
cometiendo errores, haciéndose de novias que al poco deja como si nada; degustando, como cosa importantísima, de la amistad con Bástian, Jandy y Javier; peleando con el hermanito, afrontando la voz materna y los regaños consecuentes de las niñas que
ni entiende ni lo entienden y que le producen dolores de alma y de cabeza. Por último, y no menos importante, vemos a Sergio amando, en un secreto largo tiempo guardado, a la joven que de sueño en sueño y de año en año, se vuelve cada vez más definitiva y que, como los deseos que nunca terminan, se transforma en una constante y al mismo tiempo es un símbolo que da sentido a su vida.
Aquí tenemos una novela como un recuerdo. Y con ello es posible decir: Había una vez, hace mucho tiempo, un niño y joven llamado Sergio, irreverente, tarambana, enamoradizo y demás, y con él unos amigos. Ya saben, de esos que son hoy y siempre amigos.
Alana, estudiante de medicina que esta en su cuarto semestre de universidad, donde por azares del destino termina su último año de universidad con la profesora más "despiadad" de la universidad, pero que pasara cuando se de cuente de qué no es la clase de persona que se imagina.¿Que pasara cuando se de cuenta el secreto qie guarda su profesora? y lo mas importante que hará cuando se de cuenta de que enamoró de ella...
Adelaide, la profesora más hermosa y joven de la universidad. Ella con el apodo de "La profesora más despiadad", es la persona más fría, cruel y egocéntrica al punto donde casi nadie la quiere, pero había mucho más en su pasado que una simple mujer hermosa que libro cosas horribles, iba a más allá de lo que muchas sabían.
Ambas tendrán que luchar por su amor con uña y dientes, ambas tendrán un mar de bajones pero que pasara, ¿terminaran juntas? o ¿las personas lograrán separar su amor?...