Su primera idea era escapar del martirio del cual era víctima. Después era simplemente morir congelado en la inmaculada nieva que le consumiría. Si no fuera por aquel hombre con una afición extraña a los perros estaba seguro que estaría muerto, pero ¿valía la pena seguir con vida? ¿Qué significaba para él, para si mismo?