"Y fue su olor, ese olor a malvas y nueces... " El tiempo no espera a nadie, ni da treguas ni permisos. Ni siquiera al amor. El deseo, la pasión, la ira, los celos, la confianza... todo forma parte de un mismo ser formado por dos cuerpos. No tienen nombre, ni identidad siquiera, pero sintieron de forma tan intensa que faltó poco para que se hicieran reales. Al menos en mi cabeza a veces consiguen serlo. Espero conseguir lo mismo en la vuestra.All Rights Reserved
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