- ¿Aún lo amas? - Me preguntó Rebecca, como si realmente le importara. - No me imagino cómo sería si no lo amara - Mi voz se quebró por completo al ver que Charles estaba justo detrás de Rebecca, escuchando todo lo que sentía, viendo cómo perdía mi dignidad y mi orgullo por el. Para el eso no tenía importancia alguna, era tan insignificante como me sentía que llegaba a pensar que Charles era el ser con el corazón más oscuro del mundo entero.