Atsushi Takizaki es un empresario de éxito, respetado por todos, impecable y perfecto. Un día, se despierta notando que hizo algo imperfecto, muy impropio de él, molesto por ello se propone a mostrar cuan perfecto es, pero no se esperó que ese mismo día un nuevo sentimiento, mucho más impropio de él que el no ser perfecto, brotara cual flor tímida en su corazón...
Ese sentimiento es "calidez" y viene acompañado de un extravagante chico que romperá todos los esquemas de su vida.
La historia es completamente de mi autoría, pero los personajes pertenecen al fantástico Akatsuka sensei (que en paz descanse) y al estudio Pierrot.
Esta historia contendrá lemmon (o sea, escenas de sexo explícito) una vez avanzada la historia y de vez en cuando escenas fuertes y/o lenguaje vulgar.
Escucho pasos detrás de mí y corro como nunca.
-¡Déjenme! -les grito desesperada mientras me siguen.
-Tienes que quedarte aquí, Iris. ¡Perteneces a este lugar! ¡Tú no eres una humana normal! -grita un guardia sin dejar de perseguirme...
-¡No! Yo pertenezco a mi ciudad, con mis padres... -cuando estoy por llegar a la salida veo a dos chicos.
Practicando con espadas...
-¡Sky! ¡Atrápala! -grita Rick...
Uno de los chicos desvía su mirada y nuestros ojos se conectan
Sus ojos dorados me miran fijamente...
Revolotea despreocupado su cabello rubio, pero luego...
Se da cuenta de lo que sucede y me apunta con su espada
Yo me detengo inmediatamente...