Más allá de su imperio en el cielo, más allá de cumplir estoicamente toda orden encomendada a él. El arcángel más poderoso y amado por el salvador no comprendía la razón de tanto amor hacia el ser humano. De ahí su destierro, orden divina, siete pasos a cumplir, una descendiente, la única salvación. "Veintiún días y una eternidad, para que tu alma aprenda a amar y el fruto de tu sacrificio sea bendito, para así a la humanidad salvar"