¿Qué puede pasar en un año? No somos nada más que historia y la de Sebastián es una inesperada, de esas historias de ciudad que vale la pena escribir, leer y vivir.
Elliot Jensen and Elliot Fintry have a lot in common. They share the same name, the same house, the same school, oh and they hate each other but, as they will quickly learn, there is a fine line between love and hate.