Allá por 2015 empezaba este viaje traspasando lo que un día puse en tinta a esta ya conocida biblioteca pública.
Desde entonces mi persona y mis ideas fueron cambiando y en consecuencia mis palabras para volcarlo en un verso.
Este compilado de reflexiones de medianoche, anhelos cargados e ilusiones intactas ha evolucionado y madurado junto conmigo. Por eso invito a quien quiera a leer intercaladamente los primeros escritos con los últimos para contrastar un poco al joven del algo añejo (mentira), y a su vez encontrar las similitudes entre una mente de 14 y una de 22 años. Gracias por leer. Gracias por hacer crecer el arte.
"El arte que no se comparte se muere"
- posiblemente alguien más pero yo la escuché de mi vieja