Fred siempre ha protegido a su pequeño hermano mellizo omega, él siempre ha pensado que era una pequeña rosa de bellos pétalos, vistosa como ella sola, pero que podía quebrarse y marchitarse al mínimo contacto, pero un día el castaño empieza a emitir un agradable olor que hace que cualquiera que esté cerca quiera ir tras él, y Fred no es la excepción, siempre se siente extraño cuando está con él, siente la necesidad de abrazarlo y de gruñir si alguien lo mira fijamente... Especialmente Golden, el conocido cantante del momento, además de ser un encantador millonario, es, actualmente, un deseado alpha de prestigio... Esto definitivamente es malo...