Hay veces en la vida en la que uno debe luchar para mantenerse de pie. Porque de cierta manera tu sabes que no puedes confiar en nadie. Ni siquiera en tu propia sombra. Uno siempre va a querer ser él centro de atención. Sin saber que eso solo te traerá algo malo a futuro. Después del accidente donde no solo perdí gran parte de mi memoria, si no también de mi familia. Uno aprende a desconfiar hasta de si mismo. Y en ese instante te das cuenta que la vida solo otorga lo que la gente se merece.All Rights Reserved
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