Malia sabe que no es una chica dulce y cariñosa, pero es capaz de todo para proteger a los que quiere. Lo que no sabe es como actuar frente a cierta persona. No sabe si atacarlo con colmillos y garras, o aceptar que, ahora, es una persona diferente. Porque tratándose de emociones humanas, Malia no entiende mucho. Y con él, todas ellas, conocidas y desconocidas, se alteran. Ya no sabe como tratarlo, no sabe como enfrentarse a Theo.