Adriana era una estudiante de Derecho, cuya única preocupación era no llegar tarde a la universidad. En su mente no había espacio para el amor ni para las amistades al ser traicionada en reiteradas ocasiones. Era lunes, y aunque era su día preferido ya que iría a estudiar su amada carreras, dentro de ella sentía un vacío que no quería aceptar, sabia que su vida no la estaba haciendo feliz. Ese día le ocurrieron una serie de imprevistos haciendo que llegara tarde a la estación de trenes. Con gran frustración, tomo un tren, cuando sus puertas cerraron a través de sus ventanas vio a un hombre joven muy hermoso el cual la observaba detenidamente, en ese momento sintió algo en su estómago, algo que jamas había sentido antes. En todo el recorrido no pudo sacarse su imagen de la cabeza, como si un lazo los uniera. Saco todas esas ideas de su mente ya que no podía arriesgarse a descuidar todo su esfuerzo por un corazón roto nuevamente. Aunque sabia que en ese momento algo dentro de ella había cambiado. ¿Podrá este hombre desconocido hacer que Adriana vuelva a creer en el amor?